Soy Capaz nace con el propósito de que todos los colombianos, sin importar su género, estrato o condición social, adquieran un compromiso con la construcción de la paz. La transformación del país parte de la acción individual. Son los ciudadanos los que, a través de la puesta en práctica de pequeños gestos y acciones cotidianas, pueden generar un verdadero cambio que ponga punto final al conflicto que asola el país.
“La paz le pertenece al colombiano, y si le pertenece, es responsable de lograrla, así sea perdonando al que le hizo daño, o no repitiendo lo que le inculcaron de pequeño. El proceso de paz es de los colombianos, no del gobierno”, asegura Alexandra Posada, cofundadora de esta campaña que busca crear consciencia sobre el papel social en la búsqueda de la paz.
La unión del sector privado, a través de la Asociación Nacional de Industriales (ANDI), es el eje de esta iniciativa. Más de 120 empresas vestirán de blanco los envases y paquetes de sus productos de referencia, y añadirán sobre este nuevo fondo, su propio mensaje de Soy Capaz (‘Soy Capaz de escuchar a los demás’ o ‘soy Capaz de creer’, entre otros).
Entre los 12 profesionales responsables de dar vida a este proyecto que desde hoy busca hacerse un hueco en el día a día de 46 millones de colombianos, hay siete figuras femeninas: Inmaculada Aragón, Alexandra Posada, Claudia Ibáñez, Julia Daza, María Ximena Álvarez, Ana Laura Vargas y Ana María Durán. Fucsia.co habló con ellas para conocer a fondo la propuesta de estas mujeres, formadas, profesionales y concienciadas con la tranformación del país en pro de la paz.
Claudia Ibánez es economista especializada en cooperación y gestión de proyectos para el desarrollo. Dentro de Soy Capaz, coordina las relaciones entre las empresas privadas y la campaña . Para ella, resulta imprescindible retar a la gente: “Construir la paz depende de cada uno de nosotros. Si realmente queremos que este país experimente un cambio hay que trabajar desde ya. Si queremos una nación donde haya respeto, solidaridad, resulta imprescindible ponerse en los zapatos del otro, entender la realidad del otro. Solo entonces se cerrará esa brecha que nos separa y nos empezaremos a ver como iguales”.
La campaña busca generar pequeños cambios cotidianos y actitudes individuales para lograr una transformación cultural que, a largo plazo, desemboque en una consecución real de la paz. “La idea es que seamos capaces de dar un primer paso para la paz en lo que sea. Por ejemplo, en vez de pitar porque el semáforo se ha puesto en verde y el carro de delante no avanza, tener un poco de paciencia. Ser más tolerantes, ser más respetuosos”, asegura Inmaculada Aragón, responsable de la gestión de la iniciativa.
Para ello, resulta imprescindible incluir al colombiano, como indica Julia Daza, encargada de la relación con los medios de comunicación. “A los desmovilizados, a las víctima, a todos. Mi papá y mi mamá fueron secuestrados tres veces, así que para mi esta inclusión de todos los colombianos, sin diferencias, es muy fuerte. Yo no me puedo quedar con ese dolor, con esa angustia. Esta campaña te enfrenta con esas realidades. Y demuestra que cuando hay voluntad y decisión todo puede salir”.
Las mujeres adquieren un papel clave en la buscada transformación del país. Un dato, de las más de 120 empresas que se han sumado a la iniciativa, solo cuatro están lideradas por féminas. Para Ana Laura Vargas, formada en derecho internacional y coordinadora de la campaña, fue un reto reunirse con los presidentes de las empresas que se han unido a Soy Capaz. “La mayoría son hombres y que me escuchasen al margen de mi género, como si fuera un hombre más, fue un reto en todas mis reuniones. Si no llegamos a una igualdad en la sociedad, no hay paz, no hay conflicto que se pueda resolver”.
Alexandra Posada considera fundamental la participación femenina activa en este proyecto de paz. “Las mujeres se convierten en armas de guerra para los hombre que protagoniza un conflicto. Si la mujer se da cuenta que volverse líder y participativa y activa dentro de la solución del propio conflicto, se empodera, y se consigue un cambio exponencial en esa resolución del conflicto. El cambio a nivel cultural que se conseguiría con un empoderamiento de la mujer sería mucho más extremo que si los hombres lideraran este cambio, porque ellos siempre han sido protagonistas del conflicto”.
De la misma opinión es María Ximena Álvarez, quien coordina la relación con la ANDI y toda la parte financiera del proyecto. “El problema de la mujer es que no está empoderada.Yo soy mamá y tengo que estar empoderada para poder educar a mi hijo en la idea de que, aunque tenemos una historia que debemos asumir, somos capaces de cambiar y alcanzar nuevos sueños. Yo quiero ser mujer y si a mí me da la regalada gana de salir a trabajar, lo puedo hacer, pero si me da la gana de quedarme en casa a cuidar a mi hijo, también lo puedo hacer. Eso es empoderamiento, decidir. Y tiene que salir de nosotras”.
De hecho, tiene que partir de todos los colombianos, sin exclusiones de género o condicionantes de ningún tipo. “Somos nosotros los constructores de la paz. Tenemos que dejar de echarles la culpa a los demás. Uno es paz y uno es el futuro y este está en nuestras manos. Somos capaces de conseguir un futuro mejor. Hay que coger las riendas de nuestro país, en vez de poner la responsabilidad en los demás”, considera Ana María Durán, otra de las coordinadoras de la campaña.
Fuente sacada de http://www.fucsia.co/personajes/nacionales/articulo/campana-soy-capaz/55891#.VBHHSBaImIs
“La paz le pertenece al colombiano, y si le pertenece, es responsable de lograrla, así sea perdonando al que le hizo daño, o no repitiendo lo que le inculcaron de pequeño. El proceso de paz es de los colombianos, no del gobierno”, asegura Alexandra Posada, cofundadora de esta campaña que busca crear consciencia sobre el papel social en la búsqueda de la paz.
La unión del sector privado, a través de la Asociación Nacional de Industriales (ANDI), es el eje de esta iniciativa. Más de 120 empresas vestirán de blanco los envases y paquetes de sus productos de referencia, y añadirán sobre este nuevo fondo, su propio mensaje de Soy Capaz (‘Soy Capaz de escuchar a los demás’ o ‘soy Capaz de creer’, entre otros).
Entre los 12 profesionales responsables de dar vida a este proyecto que desde hoy busca hacerse un hueco en el día a día de 46 millones de colombianos, hay siete figuras femeninas: Inmaculada Aragón, Alexandra Posada, Claudia Ibáñez, Julia Daza, María Ximena Álvarez, Ana Laura Vargas y Ana María Durán. Fucsia.co habló con ellas para conocer a fondo la propuesta de estas mujeres, formadas, profesionales y concienciadas con la tranformación del país en pro de la paz.
Claudia Ibánez es economista especializada en cooperación y gestión de proyectos para el desarrollo. Dentro de Soy Capaz, coordina las relaciones entre las empresas privadas y la campaña . Para ella, resulta imprescindible retar a la gente: “Construir la paz depende de cada uno de nosotros. Si realmente queremos que este país experimente un cambio hay que trabajar desde ya. Si queremos una nación donde haya respeto, solidaridad, resulta imprescindible ponerse en los zapatos del otro, entender la realidad del otro. Solo entonces se cerrará esa brecha que nos separa y nos empezaremos a ver como iguales”.
La campaña busca generar pequeños cambios cotidianos y actitudes individuales para lograr una transformación cultural que, a largo plazo, desemboque en una consecución real de la paz. “La idea es que seamos capaces de dar un primer paso para la paz en lo que sea. Por ejemplo, en vez de pitar porque el semáforo se ha puesto en verde y el carro de delante no avanza, tener un poco de paciencia. Ser más tolerantes, ser más respetuosos”, asegura Inmaculada Aragón, responsable de la gestión de la iniciativa.
Para ello, resulta imprescindible incluir al colombiano, como indica Julia Daza, encargada de la relación con los medios de comunicación. “A los desmovilizados, a las víctima, a todos. Mi papá y mi mamá fueron secuestrados tres veces, así que para mi esta inclusión de todos los colombianos, sin diferencias, es muy fuerte. Yo no me puedo quedar con ese dolor, con esa angustia. Esta campaña te enfrenta con esas realidades. Y demuestra que cuando hay voluntad y decisión todo puede salir”.
Las mujeres adquieren un papel clave en la buscada transformación del país. Un dato, de las más de 120 empresas que se han sumado a la iniciativa, solo cuatro están lideradas por féminas. Para Ana Laura Vargas, formada en derecho internacional y coordinadora de la campaña, fue un reto reunirse con los presidentes de las empresas que se han unido a Soy Capaz. “La mayoría son hombres y que me escuchasen al margen de mi género, como si fuera un hombre más, fue un reto en todas mis reuniones. Si no llegamos a una igualdad en la sociedad, no hay paz, no hay conflicto que se pueda resolver”.
Alexandra Posada considera fundamental la participación femenina activa en este proyecto de paz. “Las mujeres se convierten en armas de guerra para los hombre que protagoniza un conflicto. Si la mujer se da cuenta que volverse líder y participativa y activa dentro de la solución del propio conflicto, se empodera, y se consigue un cambio exponencial en esa resolución del conflicto. El cambio a nivel cultural que se conseguiría con un empoderamiento de la mujer sería mucho más extremo que si los hombres lideraran este cambio, porque ellos siempre han sido protagonistas del conflicto”.
De la misma opinión es María Ximena Álvarez, quien coordina la relación con la ANDI y toda la parte financiera del proyecto. “El problema de la mujer es que no está empoderada.Yo soy mamá y tengo que estar empoderada para poder educar a mi hijo en la idea de que, aunque tenemos una historia que debemos asumir, somos capaces de cambiar y alcanzar nuevos sueños. Yo quiero ser mujer y si a mí me da la regalada gana de salir a trabajar, lo puedo hacer, pero si me da la gana de quedarme en casa a cuidar a mi hijo, también lo puedo hacer. Eso es empoderamiento, decidir. Y tiene que salir de nosotras”.
De hecho, tiene que partir de todos los colombianos, sin exclusiones de género o condicionantes de ningún tipo. “Somos nosotros los constructores de la paz. Tenemos que dejar de echarles la culpa a los demás. Uno es paz y uno es el futuro y este está en nuestras manos. Somos capaces de conseguir un futuro mejor. Hay que coger las riendas de nuestro país, en vez de poner la responsabilidad en los demás”, considera Ana María Durán, otra de las coordinadoras de la campaña.
Fuente sacada de http://www.fucsia.co/personajes/nacionales/articulo/campana-soy-capaz/55891#.VBHHSBaImIs